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13 de febrero de 2016

Hasta pronto!




Esta es la última entrada en "Un camino de cabras", y he pensado que sumarme a la iniciativa de Harwe y el Templo de Brigit, escribiendo una carta a mi yo del pasado, sería posiblemente una buena manera de despedirme. Vamos allá;

Querida "yo" del pasado, no es la primera vez que te escribo, pero de vez en cuando está bien renovar nuestro pacto. Siempre te diré que sigas adelante, que conserves viva la curiosidad que te empuja a indagar lo que te espera en el siguiente giro del camino, lo que descubrirás por ese sendero mal trazado que te invita a desviarte o lo que aguarda más allá de cada una de esas fronteras en las que tu mundo parece llegar a su fin y desvanecerse trágicamente en el vacío. 
Y tú, tú siempre permanecerás para recibirme con los brazos abiertos y hacerme de consejera, amortizando el precio que pagaste por cada aprendizaje y recordándome todo aquello que en realidad importa, todas esas cosas que en el desvarío frenético de las circunstancias se me van de la cabeza.
Siempre te estaré agradecida, porque el nuestro es un aprendizaje común, un esfuerzo continuado en el tiempo. Yo velaré porque nunca te sientas decepcionada de lo que llegarás a ser o hacer, a pesar de los errores, de las torpezas o las caídas que supongo que nos acompañarán toda la vida -ni modo-.
No me gustaría desvelarte ninguna de las cosas que descubrirás, ni los espantos ni las maravillas, porque las unas no son sin los otros, y porque si te arruinara la sorpresa, correríamos el riesgo de encorsetarnos en un guión tramposo en vez de vivir la magia, que es de lo que se trata. Sí te diré - tal vez porque lo sé inútil- que no te preocupes tanto, pero sobretodo que vivas cada momento de la manera más plena posible: tuyos son estos días y yo no volveré a ellos si no es a través de ti (de otro modo, tampoco nos servirían de mucho). Como sabes, me tendrás a mano cuando necesites ánimos. Pásalo bien :)
Con amor,
Vae.

A todos los que habéis pasado por aquí en algún momento, muchas gracias por compartir vuestro tiempo. En unos días seguiré escribiendo desde otro sitio, simplemente, me apetecía cambiar de aires, y así como a veces va bien mover los muebles de lugar, otras puede ayudar mudarse de espacio en la red. Hasta pronto!